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OPINIÓN
Evaluar la práctica docente
El próximo mes de junio se presentará una nueva edición del informe Talis de la
OCDE, esta vez dedicado a la evaluación de la práctica docente.
Por Carmen Guaita, vicepresidenta nacional de ANPE
Un pequeño avance de este informe, presentado por el INEE, familia en los resultados académicos, podríamos llegar, entre unos
permite atisbar diferentes prácticas: desde una evaluación minu- porcentajes y otros, a la conclusión de que los mejores docentes
ciosa en algunos países - en los que incluso tienen voz las fami- trabajan en los mejores barrios. ¿No sería más razonable marcar
lias de los alumnos- hasta la ausencia de evaluación en otros. Es el punto de partida de cada niño o niña y observar su progreso?
curioso constatar que algunos países no informan a los docentes No en vano es precisamente el criterio “relación con los alumnos”
sobre el resultado de sus evaluaciones y que en muchos de ellos el más valorado por los propios docentes del estudio Talis como
este resultado no tiene incidencia sobre la promoción profesio- ítem básico de su evaluación profesional.
nal. El estudio presentará una consulta a los docentes sobre al-
La práctica docente implica la participación activa, respetuosa y
gunos criterios susceptibles de ser evaluados: la relación con los consciente en unos procesos complejos relacionados con la co-
alumnos, el conocimiento de la materia que se imparte, la ges-
municación humana. Implica también, por supuesto, participar
tión del aula, las prácticas docentes, la disciplina y conducta, la
de la dimensión social y comunitaria de la escuela con generosi-
relación con los compañeros de claustro, las observaciones de los
dad y altura de miras; pero sobre todo implica asumir y aceptar
alumnos, la evaluación presencial de la práctica concreta en el
un enorme desafío ético que se pone en práctica ante los alum-
aula, la innovación, los resultados académicos de los alumnos, las
nos, sus familias y el centro educativo de manera constante, cada
actividades extraescolares, las de desarrollo personal, la atención
día durante toda una vida profesional. Estos aspectos esenciales
a la diversidad o las tasas de promoción de los alumnos. Son cri- de la labor docente, que deben ser objeto cotidiano de autoeva-
terios muy distintos, con un grado de subjetividad muy variable.
luación, son a cambio difíciles de evaluar de manera objetiva. Si
Será interesante saber, por ejemplo, quién evalúa y cómo la rela-
cualquier desempeño profesional es una invitación a la perfec-
ción con los compañeros: ¿se realiza una encuesta abierta?
ción, la responsabilidad consustancial a la docencia convierte esta
¿Anónima? ¿Sobre la participación en las actividades? ¿Sobre la
invitación en una de las más exigentes. Por eso una descripción
simpatía? Apunta también una polémica que ha llegado hasta no-
de criterios evaluables se quedará siempre corta y parecerá banal.
sotros: evaluar la tarea docente por los resultados de los alumnos.
Es un asunto complejo porque, si es verdad lo que dicen otros fa- Sin renunciar al componente de subjetividad, me atrevo a pro-
mosos informes sobre la influencia del nivel sociocultural de la poner aquello en que me gustaría ser evaluada para mejorar, ya
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