REVISTA ANPE 622

E D I T O R I A L 3 E N las postrimerías de este curso, encontramos el momento propicio para analizar y reflexionar sobre todos aquellos aspectos que han marcado su desarrollo. Un curso enmarcado en un entorno social, político y económico cuando me- nos complejo, muy especialmente por el devenir político que ha generado inesta- bilidad en la vida de los ciudadanos y trasladado la transitoriedad al ámbito educativo. No podemos continuar en esta dinámica de con- tinuos vaivenes legislativos sin dar respuesta a las necesarias mejoras que necesita nuestro sistema educativo. Corresponde al Ministerio de Educa- ción, junto con las Comunidades Autónomas, liderar, coordinar e impulsar las ineludibles refor- mas para vertebrar y cohesionar nuestro sistema educativo, combatir el fracaso escolar mejorando el rendimiento educativo de todo el alumnado, revertir los recortes y revalorizar la profesión do- cente. Un curso que finaliza con movilizaciones y con- vocatorias de huelga en varias Comunidades Au- tónomas, en un contexto de hartazgo ante los sucesivos vaivenes normativos y el incremento cada vez mayor de la burocracia. Lo que, unido a la falta de respuesta a las verdaderas necesi- dades de los docentes de la enseñanza pública y del sistema educativo, como la disminución del horario lectivo del profesorado, el incremento de plantillas, la reducción de ratios, la reducción de la tasa de interinidad, o la climatización de las aulas, entre otras medidas, nos ha obligado a movilizarnos. Son muchos y de gran relevancia los asuntos pendientes de resolver. Con relación a la esta- bilidad de las plantillas docentes, ANPE ha soli- citado en el ámbito de la Mesa de negociación del Ministerio la necesidad de implementar de forma coordinada con las administraciones auto- nómicas las actuaciones dirigidas a la realización de un informe riguroso y contrastado sobre los resultados de los diferentes procesos de estabili- zación del personal docente que permita realizar una valoración de los mismos. Del mismo modo, para garantizar una óptima cli- matización y eficiencia energética de los centros educativos, el Ministerio de Educación, Forma- ción Profesional y Deportes ha de coordinar con las distintas administraciones autonómicas una planificación acorde a un estudio previo de las necesidades de cada centro. Realizando una mirada hacia atrás, no podemos olvidar que nuestra actual ley educativa nació lejos del consenso necesario, y tanto su trami- tación, promulgación e implantación se reali- zaron en un escenario lleno de incertidumbres y crispación política y mediática. Tras su entra- da en vigor, ya desde el comienzo surgieron los obstáculos, comenzando por los retrasos en la publicación de los reales decretos de enseñan- zas mínimas que marcaron el punto de arranque de esta ley. Como consecuencia, los retrasos de los respectivos currículos autonómicos junto a la puesta en escena de nuevos elementos dificul- taron el arranque del pasado curso. A pesar de ello, el Ministerio de Educación no ha aprendido la lección, generando un nuevo retraso curricular, en la Formación Profesional en este caso y donde quedan aún muchos aspectos por resolver como UNA NUEVA OPORTUNIDAD PERDIDA REVISTA digital Presidente Nacional de ANPE José Francisco Venzalá González

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