Revista ANPE Nacional nº 616

AUTONOMÍAS 66 ANPE 616 Lo que ANPE Melilla no va a consentir ni tolerar de ninguna de las maneras es que se ponga en duda la profesionalidad de los docentes. Somos ejemplo de vocación de servicio público, además, vemos cómo otras comunidades autónomas, cada vez más, van mejorando sus condiciones laborales (retri- butivas, aumento de plantillas, reducción de ratios, mejoras del horario lectivo, etc.) mientras que el MEFP se olvida de nosotros en estos aspectos. En plena pandemia, cambiamos nuestra forma de trabajar, para pasar de la noche a la mañana a las clases telemáticas, con nuestros propios recursos. Fuimos los primeros en volver a la presencialidad, sin mamparas, sin distancia, sin cita previa, con dobles turnos y encima ¿aguantar esto? Ni hablar, ANPE Melilla va a estar siempre del lado de los docentes, de esos profesionales que se dejan la piel en las aulas para sacar de su grupo-clase siempre lo mejor de sí. ANPE Melilla muestra su total y absoluta repulsa a las declaraciones vertidas y ma- nifiesta su incondicional apoyo al equipo directivo de los IES Leopoldo Queipo y Virgen de la Victoria y lo hace extensivo a todo su claustro de profesores. ANPE Melilla en los medios Claves del anteproyecto de la nueva Ley de Educación Vasca País Vasco Se prevé que la nueva Ley comience su tramitación en el Par- lamento Vasco en otoño y que entre en vigor el próximo cur- so, pero antes de que el anteproyecto llegue a la Cámara vasca, queda abierto el plazo para que los ciudadanos puedan realizar sus aportaciones. La nueva ley sustituirá a la vigente desde hace más de 30 años El texto se estructura en seis Títulos con 102 artículos, y apuesta por una educación de “calidad y excelencia” para todo el alumnado, por una convivencia positiva, por la igualdad de oportunidades y el respeto a la pluralidad, así como por la libertad de creencias, y pretende prevenir cualquier violencia y discriminación, así como promover la autonomía de las ins- tituciones educativas. El anteproyecto no olvida que el prota- gonismo corresponde a la escuela pública vasca. En cuanto al euskera, la ley lo pone en el centro del sistema educativo al que califica como multilingüe. El anteproyecto contempla que al acabar los estudios los alumnos deberán dominar las dos lenguas oficiales al mismo nivel, además de poseer conocimientos al menos de una lengua extranjera. El texto fija objetivos concretos, y los alumnos vascos al ter- minar la Educación Primaria deberán haber alcanzado el sub- nivel B1 en las dos lenguas oficiales. Al acabar la Secundaria obligatoria su nivel deberá haber alcanzado un nivel B2 tanto en euskera como en castellano. El profesorado también tendrá que obtener nuevos niveles, y se les facilitará formación para que alcancen un nivel de C1 o más en euskera y de C1 en inglés.