Revista ANPE Nacional nº 613

EDITORIAL 4 ANPE 613 por su falta de concreción o desarrollo, se encuentra aún muy lejos de los objetivos que se pre- tenden alcanzar con esta reforma. Por tanto, es necesario establecer como punto de partida una hoja de ruta y un calendario de negociación, a partir de los que se desarrollen los numerosos aspectos que no contempla este documento inicial, con el fin de alcanzar los objetivos previstos, mejorar la profesión docente y las condiciones laborales del profesorado, y atraer y seleccionar a los mejores profesionales. Por ello, es necesario negociar, clarificar y profundizar en aspectos esenciales que se contemplan en el documento, como los relacionados con la formación inicial, la formación permanente, la actualización de las especialidades docentes, la reforma de las titulaciones universitarias, acceso a los estudios, el diseño de las prácticas, el proceso de selección, etcétera. El proceso de negociación, desarrollo y tramitación, muy probablemente, será largo y com- plejo, pues intervienen tres entidades: Ministerio, Comunidades Autónomas y Universidad. Urge por tanto establecer un verdadero proceso de negociación que permita aclarar y definir o desarrollar aque- llas propuestas iniciales presentes en el documento y consensuar nuevas propuestas fundamentales para el profesorado como las relacionadas con la bajada de ratios, jornada lectiva, retribuciones, carrera profesional que contemple una promoción horizontal y vertical, licencias y permisos o la jubilación voluntaria, entre otras cuestiones. Si se pretende avanzar en el prestigio de la profesión docente y hacerla más atractiva, es necesario promover medidas que lo propicien. Aumentar las obligaciones en algunos aspectos o endurecer los criterios de acceso o ingreso a los estudios, junto a un análisis de base o justificación de la reforma respaldado en diversos estu- dios nacionales e internacionales donde se reflejan determinados problemas que aquejan a nuestra profesión, puede transmitir una imagen errónea a la hora de realizar un certero y objetivo diagnóstico de la situación, además de repercutir y dañar la imagen del colectivo docente. Se trata de reconocer de una vez la importancia de la tarea docente y de tomar las medidas encaminadas a su prestigio y protección, motivando al profesorado y reconociendo su profesionalidad. De la excelencia en la formación inicial y permanente, de sus posibilidades de progreso, de innovación, de estabilidad, de reconocimiento de sus buenas prácticas y de la mejora en sus condiciones laborales, depende en buena parte la calidad del sistema educativo. En las últimas décadas, los docentes han tenido que enfrentarse, y seguirán haciéndolo, a nuevos retos a los que dar respuesta. Y muy especialmente en estos dos últimos años, pues la pandemia ha hecho que los docentes tengan que cambiar sus metodologías. En este contexto de nuevas exigencias, es necesaria una actualización de la formación del profesorado. Un colectivo, el docente, que en situaciones muy complejas y difíciles y ante numerosos y continuos cam- bios normativos, en un marco de recortes pendientes de revertir y ante la llegada de una pandemia, ha sustentado una vez más el sistema educativo. Ha llegado también el momento de avanzar en el desarrollo de dos disposiciones: las adicionales séptima y undécima de la LOMLOE que afectan respectivamente al colectivo docente en general y a los profesores técnicos de FP en particular. Los Profesores Técnicos de FP constituyen un sector muy importante y la publicación de la citada disposición ha generado esperanza e incertidumbre entre este colectivo. No en- tendemos cómo a estas alturas aún no se ha dado vía libre a su integración en el Cuerpo de Profesores de Enseñanza Secundaria, a pesar de cumplir las condiciones previstas en la Ley. Para que dicha integración sea posible, habrán de esperar aún a la publicación de una segunda Ley, la de Formación Profesional, junto a sus desarrollos normativos, lo que consideramos como una circunstancia verdaderamente sorprendente. ANPE insta a la administración a una verdadera negociación con los legítimos representantes del profesora- do que permita llevar a efecto, con nuestra participación y colaboración, el desarrollo e implantación de la Ley de Educación, avanzando en la reforma o nuevo diseño de la profesión docente. Un proceso sin garan- tías de éxito, si no se cuenta con la ineludible implicación y participación de los docentes en la regulación del futuro de nuestra profesión en España. ANPE insta a la administración a una verdadera negociación con los legítimos representantes del profesorado

RkJQdWJsaXNoZXIy ODE4NjI=