Revista ANPE Nacional nº 609

AUTONOMÍAS 64 ANPE 609 Maestro, según la RAE, dícese de quien tiene un mé- rito relevante o es principal entre los de su clase, quien enseña una ciencia, arte u oficio . Sabemos que es todo esto y mucho más. Quien con cariño, paciencia y constancia trata de despertar en su alumnado la cu- riosidad de descubrir, la pasión por aprender, la re- compensa del trabajo realizado y la satisfacción de una sana relación social . Para llevar a cabo esta apasionante labor, la capaci- dad de adaptación del maestro a las fases del creci- miento, del grupo, de la zona, del momento social, ha estado siempre sobradamente demostrada. Pero fue hace ya más de un año cuando este colectivo nuestro pasó de la noche a la mañana, sin preaviso, de una enseñanza presencial a una docencia telemá- tica. Y lo hizo sin discursos, ni galones, sin bombos ni platillos, como acostumbra a estar siempre su la- bor, en un discreto segundo plano. Puesto que de sobra se sabe que el protagonista de nuestra labor es el alumnado. Pusieron sus equipos, sus conexiones, sus medios de todo tipo a disposición de la necesidad. Sus sesiones no entendían de ho- rarios, de mañana, de tarde, de mediodía, de lunes o sábados. Materiales, actividades, sugerencias, explicaciones, ejercicios y una dosis continuada de ánimo, optimismo y esperanza que siguen brindando a día de hoy, más de un año después, pro- curando el mejor de los entornos para que el proceso ense- ñanza-aprendizaje no naufrague entre tanta ola. Desde ANPE, una vez más, sin el paraguas del “día de”, que- remos hacer un reconocimiento público a todos los docentes de todos los cuerpos, especialidades e idiomas. Y agradecer la infinita capacidad de adaptación demostrada, pese a las difi- cultades tan tremendas que se han vivido y se siguen viviendo en los centros. Reconocimiento merecido y que no supone punto final, sino un punto y seguido. Ya que ANPE continúa pidiendo que se reduzcan las ratios por aula, se atiendan las NEE debidamente, se dote de los recursos necesarios a todos los centros, urbanos y rurales, y entre esos recursos se atienda nuestra histórica petición que si en algún momento cobra una importancia imperiosa es ahora, la enfermera escolar en los centros educativos. ¿Qué mejor responsable covid que un agente de salud? Y de SALUD con mayúsculas va la necesidad mun- dial. Salud física y emocional. Sin dejar en segundo lugar ésta última, ya que sabemos desgraciadamente cómo inciden la una en la otra, y que no puede haber equilibrio saludable para un menor si una de ellas falla. Los equipos docentes siguen las programaciones de aula, bajo el cumplimiento del proyecto educativo del centro, elaboran planes de igualdad, de convi- vencia, de lectura, de atención a la diversidad, de juegos coo- perativos, etc. Vamos a dejar al profesional sanitario abordar dentro del centro como merece el tema de la salud. En base a un auténtico trabajo de prevención, como contempla en sus objetivos la Educación para la Salud, marcada por Europa y recogida en nuestra Constitución (art.43) No sirve de nada hablar de prevención en salud y no actuar en los centros edu- cativos debidamente. Además de la gran repercusión preventiva que conllevaría la presencia de la Enfermera Escolar, no podemos obviar sus otras funciones esenciales: la asistencial, de apoyo al equipo docente y a las familias, la gestora e investigadora. En definitiva, en medio de una pandemia mundial no pode- mos desatender una necesidad de primer orden como es la SA- LUD de toda la comunidad educativa, con la presencia de la figura de la Enfermera Escolar. Desde ANPE, reconocemos el enorme esfuerzo y la gran labor de todos los docentes en estas circunstancias y pedimos, una vez más, que se dote a los centros educativos de un profesional sanitario. Navarra CIP ‘Virgen del Camino’ de Pamplona El profesorado da lo mejor en los peores momentos. Gracias

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