Revista ANPE Nacional nº 605
Ceuta Comienza el curso en Ceuta con la misma desidia con la que terminó el pasado, la ministra Celaá desprecia a las dos ciudades que tiene bajo su ad- ministración directa y solo concreta la observación de un metro y medio entre mesas y una ratio reducida, am- bas de imposible cumplimiento en la mayoría de centros de la ciudad, falta faltan docentes y espacios, como así se advirtió y así se está comprobando. Tras las llamadas a la tranquilidad y a confiar en un plan de contingencia elaborado por la Unidad de Programas de la Dirección Provincial, este no se dio a conocer en ningún momento y se decidió responsabilizar a los equipos directivos de la elaboración de sus propios planes. Estos equi- pos han trabajado durante el verano para intentar preparar sus centros para recibir a los alumnos, no recibieron respuesta cu- ando presentaron sus planes a la Inspección, ni recibieron ins- trucciones para efectuar una reducción del tiempo lectivo. Nadie queda contento, especialmente cuando la Administración renuncia a ejercer su responsabilidad y deja la reducción lectiva y de currículo en manos de las direcciones de los centros, lo que está muy por encima de sus competencias Comienzo de curso marcado por la improvisación El Ministerio se lava las manos con Ceuta. y probablemente acarreará agravios entre especialidades y de- sigualdades entre el alumnado. El nuevo Director Provincial, no se ha prodigado en reuniones, en todas ellas se ha limitado a ponderar el cumplimiento de medidas de desinfección e higiénicas, teniendo la presidenta de ANPE Ceuta que recordarle que la Educación es el objeto de su Ministerio y que no se han establecido medidas en el ámbito pedagógico, ni a estas alturas, casi mediado septiembre, se ha concretado el cupo docente, no se ha establecido un plan consistente de formación digital para colectivo docente, Autonomías Septiembre-octubre 2020 59 Muchos años son ya los que, desde ANPE Melilla, se vienen denunciado las ratios ilegales e insufribles que afectan a nuestra ciudad, y por desgracia ha tenido que llegar la COVID-19 para dejar en evidencia la ausencia de espacios para poder garantizar la enseñanza presencial del 100% del alumnado melillense. Turnos partidos, que dejarán a los alumnos con un 50%menos de contenidos de materias sin impartir en muchos de los ni- veles, y que a buen seguro va a pasar factura a aquellos colec- tivos más vulnerables, que desgraciadamente son muchos en nuestra ciudad y que no tienen como acceder a las nuevas tec- nologías para afrontar un curso que va a ser muy atípico. Todo esto por tener las aulas más saturadas de España, algo que se viene denunciando desde hace muchos años, y que haya estado quien haya estado al frete de la administración, que ha cambiado en diversas ocasiones, ninguno de ellos ha sido capaz de solucionar este problema. Ojalá, aunque tenga que ser por algo tan triste como la aparición de esta pandemia, sirva ésta para que nuestros responsables políticos tomen medidas serias para paliar esta lacra que persigue a nuestra ciudad desde hace más de una década y que hace que los resultados académicos de nuestros alumnos estén en los peores números del pan- orama nacional. Desde ANPE Melilla se han solicitado pruebas para todos los docentes, las cuales se han ido realizando a cuenta gotas, y cu- ando ya había un contacto previo entre docentes y entre alum- nos y docentes, se han solicitado medidas urgentes para tener garantizada la limpieza y desinfección de todos los espacios que se vayan a utilizar, se ha solicitado también la presencia de la figura de la enfermera escolar para garantizar la seguridad de alumnos y docentes. Todo esto junto a más medidas que hagan de este curso un curso lo más normalizado posible, den- tro de la incertidumbre que nos rodea. Es hora de que la ad- ministración lidere esta situación con mano firme, apoyán- dose, como no puede ser de otra manera, en los docentes, que son los que se van a encontrar en primera línea de batalla.
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